domingo, 31 de mayo de 2009

00 15 MAGNUS ERROR





ERROR MAGNUS

El error de la filosofía moderna es haberse creído absoluta, mediante el hecho de que la razón “comprende“ la verdad o al menos puede darnos la seguridad existencial que necesitamos para seguridad de nuestro pensar sin Dios. Cuando creemos que la introspección existencial-racional que hizo Descartes, es válida en todo orden de conocimiento y, más aún, cuando mediante esa “claridad” y “seguridad” en el conocer, separamos la “res cogitans” de la “res extensa”, estamos haciendo un absoluto del conocimiento que no corresponde a la realidad de este. El conocer humano es limitado a su potencia de ser y lo que hizo Descartes fue comprobar la fiabilidad del conocimiento, no su totalidad, ni justeza en lo verdadero; como todo ser limitado en su potencia de ser: sus actos, si bien válidos algunas veces, carecen de la perfección y totalidad de quien es Ser, sin ser anterior a Él que lo determinó. Esta característica, pedida por la razón, ante la inmensidad y secuencia en la aparición de los seres; ni la tiene, ni por asomo la puede comprender el ser humano. Si no aceptamos la contingencia de nuestro ser, fracasaremos al intentar comprender el ser, la materia y sus formas o al hombre mismo.
Debemos entender que la potencia de la razón humana es inmensa, pero no absoluta y mucho menos perenne; somos seres limitados y limitantes en nuestro conocer y hacer; pero es tan grande el dominio de lo posible, la potencia de ser que nos determina, que el asombro de nuestra capacidad de “hacer” y pensar, nos llena de pretensiones de conocimiento y ciencia a las cuales no podemos llegar aúnque queramos. Todos los mundos “fabricados” por los hombres, son reducidos y “casi nada” ante la magnitud de la creación material y la dimensión Espiritual que nos rodea, envuelve y subyace a nuestro “lado”. No hay confusión posible, basta abrir los ojos y los sentidos y “ver” la realidad que nos rodea y lo poco que conocemos de ella. Y sobre todo no confundir, jamás, las estructuras y definiciones “sociales” o los mundos científicos, religiosos o filosóficos que hemos hecho, con el “súmmum” de la realidad total desconocida.

sábado, 23 de mayo de 2009

00 14 PUNTUALIZACIÓN.



Mi estimado amigo, permítame tratarlo de tal manera, pues, así es, como puedo sentir, la empatía que me produce su clara posición en relación con el comunismo y la actitud de Chávez; pero también es verdad, que no puedo estar de acuerdo con Ud. en su forma de entender la ética. No hay fracaso en la ética, sino en la interiorización, en cada ser humano, de las verdades que la filosofía cristiano-aristotélica ha transmitido. No es un problema de falla ética sino de "absorción" de las verdades primordiales del cristianismo en la "voluntad de ser" de cada uno de los hombres que componemos el entramado de una sociedad. Las filosofías racionalistas de los últimos siglos, han debilitado y corroído los sustentos fundamentales de las posiciones éticas tradicionales, aún no convenientemente adaptadas a las expresiones de pensamiento de las sociedades actuales. El espíritu humano es siempre el mismo, quiero decir en sus cualidades de ser; son las definiciones racionales, impuestas por la fuerza o los vicios, los que comprometen la observación de su claridad y armonía. Los principios éticos y básicos del cristianismo son escuetos, claros y sencillos: Ama a Dios sobre todas las cosas y al "próximo" como a ti mismo (cambio el término prójimo por próximo pues entiendo que esa es la definición más clara del primer término); ¿Qué mayor y mejor definición ética se puede pedir? El problema reside, me permito repetirlo, en la "inserción” dentro de la "voluntad de ser” de cada uno, como definición personal y determinante, de lo que estás sentencias quieren comunicar y expresarnos.

Mis saludos cordiales
Jorge Antonio Lastra

00 13 AMIGO EMETERIO 2.



Amigo Emeterio,

No había podido leer su respuesta al último comentario que le hice ya que le había llegado a mi hijo David.

De ninguna manera considero descortés su respuesta, bien al contrario, soy partidario de la discusión libre y sincera de las ideas para llegar a conclusiones, sino verdaderas, al menos cónsonas con nuestra manera de ser y de pensar. Pero no creo que estemos tan distantes como Ud, sugiere; el planteamiento de la relatividad o imposibilidad de la razón para determinar como válida es una u otra cosa, es posible dilucidarlo, si no por la razón pura, al menos por las consecuencias reales de aquello a la cual conduce una cierta manera de pensar. El mito de la razón pura, que Ud. ha denunciado varias veces, tiene su presencia también en la obra de Russell y Whitehead, Principia Mathemática, donde los autores trataron de lograr el principio universal y racional que sustentara las matemáticas, como es sabido las paradojas, y sobre todo la de la implicación; demostraron la no congruencia racional de la Razón Pura; así mismo el teorema de incompletitud de Gödel, demuestra que ningún sistema racional es completo y todos adolecen de limitaciones. Pero esto que indica lo no absoluto de la razón, no quiere decir que ella no sirva o sea poco menos que inútil. Lo que creo entender que sucede es que, como se demuestra al hacer silogismos, cuando la premisa principal es falsa las consecuencias son cualquier cosa y para establecer la verdad de una premisa principal (mayor, en lógica) es necesario, como hace la ciencia, comprobarla mediante el principio de objetividad; entiendo por éste, la adecuación de la mente con el objeto determinado y su consiguiente corroboración por varias personas en circunstancias similares. Que un grupo de personas o una persona crean en algo ilógico, no invalida la lógica, sólo demuestra la libertad de la persona humana para pensar y creer la mentira o lo válido. En el marxismo una mentira repetida muchas veces deviene verdad, según ellos; pero sólo lo es en la medida de su creencia en ello y en circunstancias limitadas a su entorno social y político; pues cuando se enfrentan a lo real de la vida y lo natural su "verdad" fracasa ¿qué clase de "verdad" puede ser aquella que tiene por fuente la potencia de ser de un hombre? Lo verdadero en su totalidad nos es imposible de encontrar, pero dentro de los límites de lo existente nuestra razón entiende y hace cosas válidas y no válidas, sino ¿cómo entonces se han podido hacer tantas cosas útiles y complicadas que con la ayuda del pensamiento racional, se han hecho? La razón no es absoluta pero si vale para comprender, en nuestra medida, la verdad.

No lo molestaré más con mis reflexiones pero le puedo asegurar que si tenemos razón y ella funciona, en la medida de nuestra potencia de ser. Que otros no lo crean así no es óbice para que lo válido exista y sea pensado.

Saludos y mi amistad.

Jorge A. Lastra